Algunas fuentes dirán que el evangelio de Lucas está dirigido a tantos cristianos que desean participar del plan de salvación. Sitúan su composición anterior a la destrucción de Jerusalén (años 70) Un evangelio muy peculiar, en él se realiza el nacimiento de la promesa “Jesús”. El autor muy cuidadoso al exponer cada hecho; recoge y ordena datos, se acerca al griego y tiene la capacidad de narrar historias, escenas en un lenguaje adecuado para su tiempo y su gente.
Estamos ante un escrito que tiene una excelente temática redaccional, un atractivo cuadro narrativo que tiene a Jesús como protagonista. A lo largo de la escritura se ven comparaciones y también el uso del drama para poner sabor a la lectura. Lo metafórico se presenta para dar un tipo de enseñanza a los oyentes.
Es el Evangelio donde se presenta de manera clara la misericordia, ternura y compasión por parte de Dios. En la persona de su hijo se ve su amor que trasciende y que rompe esquemas e ideales de otros grupos.
El uso de imágenes literarias en el texto es muy claro, vemos a Jesús apasionado por el reino, también a personas marginadas que gozan de la misericordia de Dios. Todo esto llama a sus destinatarios a algo concreto, a la vida práctica en el ambiente en que se encuentran.
Algunas fuentes afirman que cuando Lucas compuso su obra ya existían relatos parecidos, un ejemplo claro es Marcos. Aparte de esto cabe indicar que los dichos de Jesús que en su entorno circulaban penetraron en su pensamiento e influyeron de gran manera en sus escritos.
El conocimiento de la historia de salvación en el Antiguo Testamente por parte de Dios juega un papel significativo para transmitir a su comunidad detalles del amor de Dios. Vemos que cada personaje tiene un papel concreto (María, Juan Jesús) en el desarrollo del evangelio.
El texto pudo ser pensado desde un “Midrash” de Jeremías, este que nos presenta la imagen de un Dios que perdona (Jer 31)
Centraremos la mirada en esta imagen del “Hijo Pródigo”, un género parabólico que dará muchas enseñanzas morales y prácticas. Lo interpretaremos partiendo de una interrogante: ¿Cuál es el proceder de Dios frente a la persona pecadora?
La parábola del Hijo Pródigo muestra la realidad de una persona perdida en el mundo, y desde este escenario concreto va revelando el verdadero sentido de la palabra conversión.
La vida en la casa paterna con deberes y derechos se convierte en una situación pesada para este Hijo menor, quiere vivir la autonomía desde la propia voluntad que lo llevará después al libertinaje y a la tristeza.
Algunos textos dicen que el mejor título para este pasaje sería “El Padre Pródigo” fue tan derrochador en amor como el hijo en el gastar. Esta narración nos revela el corazón amantísimo de Dios, que inspira confianza en el hombre pecador resultando de esto la búsqueda y el arrepentimiento.
Es de importancia citar los diferentes comportamientos humanos que aparecen en la escena:
- El padre que sabe que no debe obstaculizar la libertad de su hijo, él que respeta la decisión “Independencia autonomía del hijo” (v.12), un padre que se mantiene en alerta con vista al regreso de su criatura. Podemos ver la madurez del padre y el conocimiento que tiene de su “hijo menor” un hijo que tarde o temprano regresará a casa, a los brazos paternos.
- Un hijo menor que abuza de su libertad y que pierde todo, un hijo que cae en la pobreza, en el fracaso. Sin guía y sin ayuda no es nada. Pierde todo lo que el padre le había heredado; pierde hasta su dignidad “Va a cuidar cerdos”(v.15)
- El padre fiel a su amor acoge a su hijo. Después de hacer un autoconocimiento “Entrando en sí mismo” (v. 17a) recapacita y recuerda la abundancia de su casa. Se pone en camino y es acogido por el padre “Salió corriendo a su encuentro, lo abrasó y lo cubrió de besos”(v. 20)
- Aparece el hermano, “El hijo mayor”, enojado va y le reclama al padre; celoso de ver el trato especial para su hermano perdido no puede descubrir el amor infinito de su papá, amor que es igual para todos, que no se fija en los errores, sino que mira la dignidad de la persona (v.28-32)
A Jesús le interesa la salvación de las almas, vino al mundo por los pecadores y no por los justos, son los pecadores los que buscan a Jesús y son los fariseos los que critican y murmuran. Se puede sintetizar esto de la siguiente manera:
Ø Todos tenemos necesidad de conversión, los pecadores y también los que se tienen por justos (fariseos) estamos bajo pecado y es Dios quien espera con los brazos abiertos nuestra conversión.
Nuestra actualización la expresamos en los siguientes puntos:
ü Esta bella narración pone en alerta al lector, un alerta para que sea bondadoso como Jesús y misericordioso como es el Padre Salvador.
ü Implica un seguimiento para cada cristiano, un seguimiento que no sólo se encierra en lo litúrgico, en los eventos, sino que también lo manifiesta la vida, la manera de relacionarnos, la forma de vivir la pobreza desde Cristo, la práctica de la misericordia, la actitud por dejar de juzgar al hermano.
ü Una enseñanza para los fieles cristianos que se alejan de su hogar “La iglesia”, unos porque se ven tentados por lo fácil, otros porque no les llama la atención el deber, otros por abusar de su libertad y coger otros senderos. Invita a la conversión, a conocernos mejor y ver en este discernimiento la bondad y la misericordia de Dios que nos espera.
ü A ser hermanos en una sola familia, “Lo perdido lo hemos encontrado” por eso es necesario celebrar tan gran evento “Una sola iglesia que comparte la misma mesa”.
ü Nos invita a todos a participar de esta gran alegría, de la misma manera como se invita al hijo mayor, así nos invita a cada uno, hacer fiesta por un hermano que estaba fuera de casa y ha retornado.
GRUPO: LOS NECESITADOS DE DIOS
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